Mikkeller Black Ink and Blood: Rara, rara, rara.

Colaboración, si así se puede llamar, con Jacob y Jonas de la tienda de tatuajes Crooked Moon de Estocolmo. Pues que decir... Uf por donde empiezo. Primero, el estilo, una Imperial Stout de 16,5º que le llega bien... Al servir abundante espuma color marrón, prevalece en el tiempo y la carbonatacion es ligera. En nariz asoman ligeros toques a frambuesa y maltas torrefactas. Ya en boca la primera sensación es de dulzor, pasando por tonos cafeteros, pero poco a poco se va transformando en un notable picor que incluso en momentos llega  a molestar. A pesar de su abundante alcohol, los sabores acentuados ayudan a enmascararlo. Final muy seco y amargo. No llega a ser de mis favoritas pero tiene su carácter.

Mikkeller Black Ink And Blood